Porque me olvidé de quererme
Hace poco en una sesión de coaching alguien me dijo una frase que me impactó: “me olvidé de quererme” voy a aprender a quererme. Fue un momento clave en que la persona tomó consciencia de cómo y porqué su vida había sido de una manera y no de otra.
En este momento asumió la responsabilidad de sus propias decisiones. Muchas las tomamos a temprana edad, cuando apenas tenemos herramientas ni recursos para hacerles frente de otra manera. Nos movemos en un sistema binario de placer y dolor, por lo que adoptamos la respuesta que nos ha sido útil, con la que nos sentimos protegidos y superamos la experiencia.
Es así como aprendemos a reproducirla, cada vez que nos encontramos ante un estímulo que nos haga revivirla.
Por lo que empezamos a adoptar patrones emocionales y conductuales que nos sirven para vivir. Hasta aquí todo es correcto, salvo que esos patrones que pueden ser creencias o pensamientos, emociones recurrentes y comportamientos, deben ser revisados y actualizados. Y te preguntarás y… ¿Esto qué significa? o ¿Cómo lo hago?
Pues exactamente como haces con tu ordenador o tu teléfono móvil… ACTUALIZÁNDOLO.
Cuando de pequeños vivimos experiencias, aprendemos a responder ante ellas con las capacidades de ese momento. Cuando creces y te conviertes en una persona adulta, ya puedes preguntarte muchas cosas como:
➤ Esto que creo, pienso o siento… ¿Es verdad?
➤ ¿Hay otra cosa que pueda pensar, sentir o hacer al respecto de esta creencia, emoción o situación?
➤ ¿Qué me he estado perdiendo por pensar, sentir o hacer «esto»?
Aprender a valorarme
Podría hacerte muchas preguntas al respecto y con estás ya puedes empezar a descubrir algo sobre ti. La vida va ofreciéndote oportunidades de cambiar, mejorar y crecer constantemente, y una relación tóxica es la oportunidad que tienes para ver y te preguntes ¿Cómo aprender a quererme?:
▷ ¿Qué tipo de elecciones estás haciendo?
▷ ¿Qué estás tolerando que no deberías tolerar?
▷ ¿Qué límites has dejado de poner?
▷ ¿Quién te negó, limitó o condicionó el amor cuando eras pequeña?
Casualmente hoy he leído un pequeño artículo de un colega y coach Luis Bueno, que me viene al pelo para introducir lo que te voy a contar y que decía algo así como:
“Que la vida se va adaptando a tu propia forma de jugar. Que cada situación es una oportunidad para que tomes conciencia y vayas subiendo niveles. Que tienes derecho a pensar, sentir lo que quieras, pero no la obligación de hacerlo.”
Luis Bueno
Al final todo depende de las decisiones que tomas, cierto que a temprana edad no puedes tener un mayor grado de conciencia, pero ahora siendo adulta sí. Revisa qué decisiones importantes has tomado en tu vida y si podías haber tomado otras.
Siempre hay varias opciones, solo que algunas no te convencen, porque van en contra de tu sistema de creencias, de tus hábitos y vicios emocionales y eso supone salir de la zona de confort y afrontar resistencias, que hacen que repitas una y otra vez, el mismo patrón.
Hoy estoy hablando del amor, del amor a ti mism@, de esa frase inicial de “Me olvidé de quererme”. Si mantienes una relación insana, seguro que te encontrarás con muchas así, porque en realidad la solución, no está en que la otra persona cambie, sino en que lo hagas tú.
En el momento que decides que la primera persona que te va a querer eres tu, dejas de necesitar que otro lo haga y por ende, dejas de ser dependiente de ella. Sólo conseguirás tener una relación equilibrada, que te haga feliz, donde el respeto mutuo sea una condición ineludible, donde cada uno se permita ser el/ella mism@.
Aceptar al otro tal como es no significa tolerar todo, sino respetar; respetar a la otra parte y que te respete a ti también.
Piensa qué es lo que realmente buscas en esa relación que no te acaba de hacer feliz.
➤ ¿Qué es lo que no te gusta y estás aceptando?
➤ ¿Qué es lo que te gustaría y no tienes?
➤ ¿Qué te estás contando para seguir en esa relación?
➤ ¿Qué te contarías si supieras que eso no es verdad?
Recuerda una cosa, tomamos decisiones en función de lo que creemos y pensamos, de nuestros valores pero sobretodo recuerda que quien tiene la responsabilidad de tomar una decisión eres tú .
Como ya te he dicho antes, tratamos de evitar situaciones dolorosas y eso nos hace inclinar la balanza hacia un lado u otro, pues el dolor es parte de la vida, para que exista placer debe haber dolor, es el «YIN y el YANG» , las dos caras de la misma moneda.
Es en el dolor, entendiéndolo como incomodidad, inseguridad, miedos, retos… donde hay una oportunidad de generar nuevas opciones de respuesta en determinados momentos, de aprender y de tomar conciencia de lo que funciona y lo que no y sabrás cómo quererme a mí misma o cómo quererse a uno mismo.
En el artículo anterior sobre dependencia emocional en el que hablé de las necesidades emocionales de las personas (dependencia emocional). Te invito a leerlo y revisar qué necesidades básicas emocionales, estás tratando de cubrir, manteniendo relaciones dependientes, de alto nivel de sufrimiento, y donde permites te maltraten.
Revisa la necesidad de amor y los 3 tipos de amor, para testear en cuál de los 3 niveles te situarías:
1- Amor bebé: Solicitas amor, es el dame, dame.
2- Amor prostituto: Doy amor a cambio de recibir algo.
3- Amor incondicional: Doy amor sin esperar nada a cambio.
Sé que puedes estar pensando… a mi no me pasa esto, y es genial que así sea, aunque asegúrate de tomar las riendas de tus emociones, de vivir conforme a tus valores sin violarlos ni sacrificarlos para que otra persona pueda vivir los suyos.
También puedes leer otro de mis artículos hoy decido ser feliz.
Sobre todo recuerda esta frase, escríbetela en una cartulina, ponla en el espejo, o donde la puedas ver cada día, para que tu cerebro la vaya integrando y nunca lo olvide:
“Aprender a quererme es mi prioridad”
Si mantienes una relación tóxica, si quieres cambiar y no puedes, si sientes que lo que deseas nunca llega… Quizás es el momento de empezar a plantearte qué hacer al respecto.
Es posible que no puedas hacerlo sola, o que decidas emprender un camino en solitario hacia tu propio crecimiento personal. Más quiero decirte algo:
«Yo puedo ayudarte a hacer mucho más corto ese camino, a conseguir resultados de manera más rápida y beneficiosa para ti. Sin embargo, tu tienes el poder, la decisión es tuya. Ahora ya sabes que todo depende de ti, y que las decisiones del presente son los resultados del futuro».
En cualquier caso el planteamiento es:
Si decido… me puedo equivocar.
Si me equivoco… tengo la oportunidad de aprender.
Recuerda una cosa… no decidir también es una decisión de la que te puedes arrepentir y con la que te puedes equivocar… por lo tanto, mejor actuar y salir de dudas.
Aún te preguntas… Sabré aprender a quererme. No tengas miedo a decidir por si luego te arrepientes. Aquí te dejo un artículo con más recomendaciones para quererte.
Eso es todo por ahora, como siempre te invito a que dejes un comentario si te ha gustado este post, que me sugieras algún tema en concreto que te sirva de ayuda y podamos seguir aportando valor a la comunidad. También te invito a que dejes un tip de ayuda de cómo aprender a quererse uno mismo, cómo subir o mejorar el autoestima, valorarse como mujer, tu experiencia, etc. Aprendo a quererme ❤️